Marta López ha sido, sin lugar a dudas, uno de los personajes televisivos durante la pandemia del COVID-19 que todavía golpea con fuerza a nuestro país. En abril, en pleno confinamiento, protagonizó el famoso episodio reconocido ya como "Merlos place". Algo que le sirvió para sacar tajada en la televisión hasta que, hace bien poco, fue despedida por Mediaset por su irresponsabilidad frente al COVID-19. Y no es el único revés profesional que ha recibido.
Marta López suma otro revés laboral y agrava su crisis económica
La conductora Marta López fue despedida de Mediaset por su irresponsabilidad frente al COVID-19.
Han transcurrido cuatro meses y aún se desconoce si todo fue un montaje o un mero error. Lo que sí está claro es que Alexia Rivas y Alfonso Merlos están enamorados. Pero no son los únicos que ganaron con toda esa historia. El paseo de Alexia Rivas casi desnuda mientras Alfonso Merlos entraba en directo en el programa de Youtube Javier Negre le vino de perlas al periodista para dar a conocer su programa. Marta López parecía la más afectada, con lágrimas en cada intervención en plató.
A pesar de que Marta López negó cobrar en sus primeras intervenciones, lo cierto es que no le puso pegas al nuevo contrato que le ofreció Mediaset. Su rostro, habitual en Viva la Vida, copó las principales portadas del corazón y Telecinco tenía que exprimir eso. Por ello la ofrecieron 33.000 euros en tres meses, según la revista Semana, con ciertos condicionantes. Su rostro tendría que aparecer en el Deluxe y tres días por semana en Sálvame.
Marta López cuenta con un servicio de catering para bodas y otros eventos. El COVID-19, como a muchos otros, también le ha golpeado a ella. Las bodas fueron canceladas y los eventos, al no poder darse con muchas personas, dejaron de celebrarse. Unos meses parada en los que, de no ser por el escándalo de Alfonso Merlos y Alexia Rivas, lo hubiese pasado mal económicamente.
La trágica noticia para Marta López se produjo la semana pasada. No se ha hecho oficial, pero todo apunta a que la colaboradora dio positivo en COVID-19 y habría sido por una irresponsabilidad. El contrato por el cual iba a percibir 33.000 euros cada tres meses (siempre y cuando le fuese renovado) se ha marchitado. Y a ello tiene que sumarle otro revés: la cancelación de la boda de Fani y Cristopher, que iban a contar con su catering. Desde luego, muy malas noticias para Marta López, que tiene otro negocio en concurso de acreedores.