Una lluvia de críticas ha recibido el príncipe Guillermo tras conocerse que mantuvo en secreto su diagnóstico de COVID-19.
La noticia ha alterado específicamente a los grupos antimonarquía, que consideran que esto confirma la "falta de liderazgo" del príncipe Guillermo.
Según varios informes, el duque de Cambridge contrajo el virus en abril, pero nunca lo compartió con la opinión pública.
Graham Smith, director ejecutivo de un grupo anti-monarquía llamado Republic, criticó al príncipe Guillermo afirmando que su acto indica una "opinión condescendiente del público".
"Todos los demás funcionarios públicos que lo han detectado han sido honestos y abiertos al respecto, sobre todo como una forma de mostrar algún tipo de liderazgo y liderar con el ejemplo y tomando las precauciones necesarias", subrayó Graham Smith.
"No tratamos al público como a niños, les decimos la verdad y tú decides qué les va a preocupar (...) La gente estaba preocupada por Boris Johnson, pero nadie lo escondió, a todos se les dijo lo que estaba pasando y la gente pudo hacer sus propios juicios", añadió el declarante.
Según The Sun, el príncipe Guillermo le dijo a un confidente que no quería que la gente se preocupara por su salud.
"Estaban sucediendo cosas importantes y no quería preocupar a nadie", dijo el duque en ese momento.
Después de su diagnóstico, el príncipe Guillermo continuó desempeñando sus funciones en línea y fue tratado por médicos de palacio en Norfolk.
Sin embargo, trascendió que fue golpeado "bastante fuerte" por el virus y en un momento tuvo problemas para respirar, dijo la publicación.